Codalario: "
Ángel Ódena encarnó a Juan de Eguía con esa voz recia y sonora que le caracteriza, de timbre (...) rotunda y viril, que se ajusta bien al personaje, cínico, aparentemente dominador de la situación, pero vulnerable en el fondo y que se arrepiente sinceramente al final. (...)
Antonio Gandía la mejor prestación vocal de toda la noche. Timbre atractivo, facilidad arriba, con sonidos bien posicionados y con punta, además de una bien delineada línea de canto sustentada en un fraseo cuidado (...)
Rubén Amoretti, de acentos siempre intencionados, voz suficientemente armada de bajo-cantante, amplitud y buena línea. Muy ovacionado también en su gran momento solista, la fabulosa romanza, plena de ecos antillanos, “Despierta negro”."
Platea Magazine: "
Amoretti sonó rotundo, aportando además muchas dosis de teatro con su labor en las partes habladas."
Platea Magazine: "Sobrealiente el Leandor de
Antonio Gandía, de impecable factura cánora. Regaló un “No puede ser” perfecto, intachable, que recibió una larga ovación. Sospecho que de haberse representado todas las funciones, alguna habría bisado. Entregadísimo, viril, recio, enérgico el Juan de Eguía de
Ángel Ódena, nobilísimo en su final y sabio en el Chibiri, chibiri que Sorozábal escribiese para Marcos Redondo en el estreno madrileño de la partitura. Brillante e inteligente igualmente Sabina Puértolas en un papel que no es tan sencillo como pudiera parecer y sobresaliente también
Rubén Amoretti como Simpson, impecable en su Despierta negro."